Pep guardiola sedespide del FCB tras tener 4 a;os con ellos

El calendario ha querido que el último partido de Josep Guardiola en el Camp Nou, en su primera etapa como entrenador del Barça, sea un lujo:el derbi catalán frente al Espanyol, el sábado 5 de mayo a las 21.00 horas. Para aderezar el cóctel, un árbitro a la altura de las circunstancias, Fernando Teixeira Vitienes.    

Fernando, el mayor de la saga Teixeira, fue el que disgustó a los blaugrana en el duelo en Getafe, cuando no les señaló un penalti y anuló un gol por fuera de juego en el tiempo de descuento y con 1-0 para los locales. También, es el trencilla al que José Mourinho esperó en las entrañas del Camp Nou al final del encuentro de cuartos de final de la Copa del Reu frente al Real Madrid que acabó 2-2. 'Mou¿ le dijo que era “un sinverguenza” y que le gustaba “joder a los profesionales”.

Hay aspectos menos escabrosos pero igualmente morbosos que adornarán el partido. Los derbis entre Barça y Espanyol han recuperado buena parte de su rivalidad en los últimos años. El balance entre Pep Guardiola y Mauricio Pochettino en el Camp Nou estos años es de dos triunfos para el de Santpedor (1-0 y 2-0) y uno para el de Santa Fe (1-2); y de dos empates y dos triunfos para Pep en Cornellà-El Prat.

A los pericos les escoció especialmente el 1-5 de la Liga 2010-11, pero en el presente campeonato se tomaron cumplida venganza con el 1-1, polémica incluida: Turienzo Álvarez no señaló un penalti por manos de Raúl Rodríguez en el descuento.

Sin duda, esos dos puntos le hubieran ido muy bien al Barça en la lucha por encadenar un cuarto título. Un título que, en función de lo que suceda en los partidos de mañana (Barça-Málaga y Athletic Club-Real Madrid) podría estar adjudicado matemáticamente. De la misma forma, los blanquiazules pueden llegar al Estadi sin opciones de clasificación para la próxima Europa League.

En cualquier caso, el Barça-Espanyol se antoja un buen partido para que Josep Guardiola ocupe por última vez el banquillo del Camp Nou como técnico local, al menos por ahora. También, para que la afición blaugrana acuda en masa a homenajear al técnico y a los jugadores tras una temporada intensa, en la que todavía quedará por jugarse la final de la Copa del Rey y para cerrar un periodo de leyenda.